Calle del Pintor Rafael García Bonillo y 4 obras suyas

Interesantísimo lo que me ha envíado don Rafael Fernández Gallego,  cuatro fotos de cuatro acuarelas de García Bonillo, con las que pagó a su padre los servicios de mecánica que le realizó hace muchos años, a principios de los 70, y otra foto del cartel de una calle de Granada que lleva precisamente el nombre de García Bonillo. Adjuntamos las cinco fotos. 

Opina Fernández Gallego que estas acuarelas –estos cuadros, dice- de García Bonillo “quizás por no ser de encargo o por ser simples impresiones, no son muy perfectos”, y parece las valora más como  recuerdo de familia. Pues bien, además de agradecerle su tan valiosa información para los amantes de la obra de García Bonillo, le he contestado que no son obras menores, y que únicamente una de ellas quizá puede haber sido repetida por él antes o después, pero las demás son muy originales y valiosas, en la línea típica del realismo mágico –como hemos denominado su estilo pictórico- de García Bonillo. 

Reproduzco nuestra conversación digital:

“Buenos días. Ayer de regreso de un paseo por una lluviosa Granada y ante la perspectiva de fotografiar un espectacular arco iris, aparqué el coche en un callejón peatonal por la zona del Instituto Severo Ochoa, y cual no sería mi sorpresa cuando el rótulo de la calle era la del Pintor Rafael García Bonillo. Mi sorpresa fue mayúscula, pues mis padres atesoran 3 obras y para ellos tienen un gran valor sentimental. Ellos me regalaron otra acuarela de García Bonillo cuando me casé y desgraciadamente un quinto se perdió en un incendio en casa de un familiar.

 La historia de estos cuadros familiares es curiosa: mi padre en los primeros años 70 tenía un taller de mecánica con otro socio en el Albaycin y el pintor llevaba a reparar allí su coche. El artista estaría mal de dinero o no muy sobrado y les pagaba en obras, que mi padre aceptaba gustosamente. El taller cerró y los propietarios tomaron caminos profesionales diferentes. Años después mi padre y el pintor se encontraron en unas vacaciones en Almuñécar y rememoraron entre risas las vicisitudes de esos cuadros, que quizás por no ser de encargo o por ser simples impresiones, no son muy perfectos, pero para nuestra familia es un recuerdo imperecedero de un gran artista y unas maravillas de las que disfrutar en casa.

Le mando los cuadros de mis padres. El mío propio se lo adjuntaré en un posterior mensaje. Un saludo y perdone que le moleste con estos recuerdos familiares, pero en mi opinión personal es un gran artista y debe ponerse en valor.

Las imágenes no son muy buenas pues se hizo ayer mismo visitando a mis padres y contándoles la anécdota de la calle que le han puesto en Granada (que también se adjunta).”

Y mi contestación:

“Que interesante lo que me cuenta. Tampoco yo tenía ni idea de la existencia de la calle. En cuanto a las acuarelas, son muy típicas de García Bonillo, muy buenas, la de los árboles yo creo que la pintó varias veces con ligeras diferencias. Efectivamente las fotos tienen reflejos, si usted pudiera volverlas a hacer, se lo agradecería. Para evitar los reflejos sin que tener que quitar el cristal, yo uso el sistema de hacer la foto desde abajo y sin flash, y después la corrijo con el programa Photoshop. Si usted no tiene este programa, mándeme las fotos sin corregir pero tomadas desde abajo, sin reflejos. Espero también la foto de la cuarta acuarela. Muchas gracias por todo.”

Recibida una mejor versión fotográfica de las cuatro acuarelas, las incluyo ya en este blog.